El puente, de longitud total 170 m, con vanos laterales de 45 m y vano central de 80 m y ancho de tablero de 10,3 m, se engloba dentro de las obras de mejora de los accesos a Castrelo do Miño. Presenta una tipología de tablero con doble acción mixta de canto constante igual a 2,89 m, formada por un cajón metálico cerrado con almas inclinadas que se transforma en una sección abierta bijácena en las secciones de vano, manteniendo en cualquier caso la inclinación de las almas. En la zona inferior abierta, se dispone una rigidización triangulada formada por tubos de sección rectangular, cerrando de esta forma el circuito de torsiones. El hormigonado de la losa superior se realiza sobre prelosas prefabricadas de ancho igual al del tablero, sobre las que se vierte hormigón in situ hasta completar un espesor máximo de 0,3 m entre almas de cajón. El espesor mínimo de losa en los extremos de los voladizos es de 0,2 m.
El montaje de la estructura metálica se realizó lanzando desde los dos estribos hasta alcanzar el punto medio del vano central, consiguiendo reducir las afecciones debidas a la construcción del parque de lanzamiento y abaratando notablemente el proceso al reducir los tiempos de lanzamiento.